Las vistas son brutales y la oferta de cocina no las desmerece. Una de las nuevas propuestas es un gustoso y meloso arroz de rabo de buey con la atrevida intervención de mejillones, una apuesta arriesgada de óptimos resultados. La carta se mantiene a la altura, donde encontraréis éxitos de siempre como el arroz negro y la fideuá.

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Sandra Cinto (São Paulo, Brasil, 1968) presenta en el restaurante MARILUZ “FUENTE” Es necesario un depósito para confirmar la reserva. No se reservan los menús de grupo para el mismo día.

Casa Costa

Entre los platos estrella, hay que reivindicar el pulpo tatemado y el mole con pollo de El Prat. Del grupo restaurador Somos Esencia (Bar Bauma, Fauna, Agua). También tienen opciones de carne, pescado y veganas. Con más de treinta platos originales, suculentos y tentadores como las setas maitake con berenjena al horno, salsifíes, anacardos y miso blanco y la hamburguesa de frijoles negros y pan brétzel.

Los Caracoles cumple 190 años con la ilusión de seguir

El pescado fresco se puede comer frito o a la plancha, con ajo y perejil. Pero no, de hecho, estás en una taberna de pescadores como las de antes. Parece que entres en una casa particular de planta baja de la Barceloneta y que siguiera al comedor de casa de alguien. Pertenece al grupo restaurador Olivé Slow Food (Cañete, Paco Meralgo, Pastelería Baixas).

Este es el nuevo club para los amantes de la gastronomía

La propuesta mira a esa cocina nórdica que atrae a Tarruella (en algunos platos con guiños mínimos, como el toque del eneldo). En un ambiente de barrio, el local también ofrece buenas opciones de menú de mediodía, con precios ajustados y sabores caseros, también durante el fin de semana. La carta ofrece tapas frías como las anchoas del Cantábrico y los boquerones en vinagre, así como platos calientes como la brocheta moruna, los mejillones al vapor y las almejas a la parrilla. Si preferís concentraros en el marisco para compartir, tiene tres plataduras para dos personas; el cascarón (29.95 euros), el fritura (39,95 euros) y la bandeja (74,90 euros).

Fòrum Gastronòmic: La cocina catalana vive un nuevo renacimiento entre la tradición y la vanguardia

En el Real Club Marítimo, frente al Maremagnum, Fiskebar despliega una propuesta singular en un entorno privilegiado, con vistas abiertas al puerto y al Paseo Colón. Dentro de este universo, nos detenemos en cuatro restaurantes de Barcelona, cada uno con una singular propuesta gastronómica. En total, el grupo suma 24 restaurantes & clubs, todos con la misma filosofía de crear ambientes singulares para disfrutar del entorno y deleitar el paladar. En más de tres décadas de historia, el Grupo Tragaluz ha tejido en Barcelona una auténtica constelación de restaurantes que va mucho más allá de la cocina. Son, explica Alex Duran, al frente de las cocinas del grupo, restaurante fiser barcelona los primeros pasos de una cocina que arranca con tanta prudencia como ilusión en un restaurante cuya sala dirige Carlos Vilà Sagnier.

  • El menú de mediodía os permite disfrutar de esta cocina por solo 23 euros.
  • Sólo encontraréis un menú de degustación nocturno, de 8 a 15 platos, y algún brunch efímero que anuncian en las redes.
  • Casa Costa fue un restaurante emblemático de la Barceloneta de los años 40, con una ubicación privilegiada frente a la playa de Sant Miquel.
  • La última zona de mesas para grupos de 5 o 6 personas se diferencia del resto gracias a la elección de mesas circulares de nogal teñido.

Los 21 mejores restaurantes peruanos de Madrid Los 11 mejores restaurantes de Córdoba para comer El chef Jaume Balada, que dibuja todos sus platos antes de montarlos, reinventa su oferta gastronómica según la época del año, para garantizar la mejor calidad siempre. Situado en lo alto de una colina, con espectaculares vistas al Mediterráneo, y una decoración exquisita de fuerte influencia marina firmada por el prestigioso estudio Rose Ink Workshop; es el lugar ideal para exprimir y saborear lo mejor de la zona estas fiestas.

Una barra de piedra y microcemento actúa como eje central de la actividad

Una coctelería de inspiración industrial -que por la mañana se convierte en un espacio para trabajar y degustar un café de especialidad, y el resto del día ofrece una carta de sándwiches y picoteo muy apetecible- con los mejores dj´s de la ciudad al frente de la selección musical. En su carta, platillos para compartir como el falafel y olivas con labneh, pastas sin artificios como el ravioli a la servilleta, una exquisita torrija de setas y parmigiano, un contundente farcellet de pintada y foie, o un ligero crudo de pescado con cítricos. Te presentamos un espacio que huele a hogar, con paredes de piedra, con luz tenue, sillas de madera, mesas de mármol y mantelería de bar clásico. Porque P41 es un bar de cócteles en el que puedes saborear creaciones clásicas con un twist o mezclas originales con sabores que recorren casi todos los rincones del planeta; pero también es un espacio para degustar un vermut de etiqueta o una infalible copa de champagne. Eso es Gala, el restaurante más cool del grupo Isabella´s. La carta de Fiskebar se acompaña en la parte líquida de por los mejores vinos orgánicos para un chin chin de lo más especial.

Un buen lugar para comer pescado y marisco en un ambiente relajado. Con los mejores ingredientes de temporada que puede ofrecerle el mar, el menú cuenta con marisco crudo y marinado basado ​​en la cocina clásica gallega, maridados con elementos de inspiración japonesa. La sala principal es un espacio volumétrico acristalado, donde la joya de la corona, es la gran barra de mármol. Diseñado por Isern Serra, el restaurante Fiskebar se inspira en los bares de pescadores daneses, cercanos a los puertos. Más allá de la cocina, ir a cenar a la torre del teleférico tiene un punto romántico, con unas vistas espectaculares de Barcelona y el mar.

Por último, destacan como proyecto lumínico las lámparas de suelo Shoji, de Davide Groppi, que nos recuerdan a las maravillosas Akari de Isamu Noguchi. Los armarios y gueridones se han fabricado con el mismo acabado de nogal oscurecido, de modo que se genera un panelado que integra el conjunto y da carácter al pasillo. Unas linestras de alabastro de Contain Studio marcan el acceso al baño y las dos salas.

Camping Mar, Fiskebar, Tapas Lobito y Bosco de Lobos son la prueba de que el Grupo Tragaluz ha hecho de la diversidad su mejor carta. En ese apartado encontramos platos acertados como los mezzi pacheri con ragú de rodaballo y espárrago marino, los tagiolini cipriani con vodka o los fettuccini con cigalas. Tiene peso destacado en la propuesta la pasta, que trabaja bien el chef, Matteo Spinelli, de origen calabrés. Veinticinco años pasó en la casa, con un recorrido que fue desde la pica hasta el cargo de jefe de cocina. Se trata del Fiskebar (paseo de Itaca, 3), que pretende buscar cierta inspiración en la fotogénica cocina nórdica. En aquellos tiempos en que la propuesta gastronómica no era tan variada ni interesante como llegaría a serlo, tuvo su peso aquel establecimiento que desaparecería en 2005 y donde ahora recala el Grupo Tragaluz, que ha embellecido el local.